Beatris Calderón es una mujer de 50 años habitante del barrio Pedro Espinoza de Rivas. Ama de casa y con tres hijas que mantener, su esposo le envía remesas desde Costa Rica que eran el único sustento de la familia hasta hace un año, cuando Doña Beatris se integró al proyecto de fortalecimiento de las habilidades con la idea de elaborar nacatamales para crear una fuente de ingreso extra.
Surge una idea de negocio
Unos cuantos meses después de empezar a vender los nacatamales, doña Beatriz se inscribió en el Curso de Gestión Empresarial impulsado por FIDES-CAMINA. A pesar de tener una educación básica (tercer año de secundaria aprobado), mostró un enorme compromiso y motivación por aprender pese a las dificultades encontradas, siendo una de las participantes más activas del curso.
A lo largo de la capacitación y con el afán de “dejarles un legado a sus hijas” se dispuso a transformar la idea de su negocio con el fin de desarrollar una actividad económica permanente, ya que los nacatamales los elaboraba solo los fines de semana, descubriendo entonces la oportunidad de crear una miscelánea que satisficiera las necesidades de su comunidad. Diseñó su plan de negocios en base a esta idea y se planteó todos los pasos a seguir para llevarla a cabo.
Inauguración exitosa
Seis meses después de culminar el curso de Gestión Empresarial, Boom Market abrió las puertas al público. Parte del proceso de creación fue la inversión que realizó doña Beatris en la construcción de un local destinado para el negocio, su esposo la apoyó para llevarlo a cabo. Además, FIDES-CAMINA le entregó un capital semilla para que pudiera equipar el local y le aprobó un financiamiento para capital de trabajo.
En solo dos semanas el negocio alcanzó ventas mayores de C$22,000 córdobas y actualmente se encuentra en proceso de legalización.
